Por disposición presidencial, desde este lunes 16 de junio se trasladan oficialmente a Guayaquil la Comandancia General de la Policía Nacional y el Ministerio del Interior, con el objetivo de fortalecer el control y la coordinación en la lucha contra la violencia en los 30 distritos más violentos del país. Esta medida responde a la alarmante escalada de homicidios y actos delictivos, especialmente en Guayaquil y Durán, que concentran cinco de estos distritos.
Guayaquil, sacudida por un incremento del 200% en muertes violentas en zonas como Nueva Prosperina, el distrito más peligroso del Ecuador, será el epicentro desde donde se dirigirán las operaciones policiales y militares para combatir a las bandas criminales y reducir la inseguridad. En Nueva Prosperina, por ejemplo, se registraron 361 asesinatos en lo que va del año, y las Fuerzas Armadas patrullan diariamente para contener la violencia extrema que afecta a esta zona.
La concentración de las autoridades en Guayaquil busca mejorar la eficacia de las estrategias de seguridad, facilitar la coordinación interinstitucional y responder con mayor rapidez a los hechos criminales que afectan a la población. Esta acción se enmarca en un contexto donde Ecuador ha experimentado un aumento del 63% en homicidios en 2025, con Guayaquil como una de las regiones más afectadas.
La medida presidencial pretende revertir la tendencia de violencia que ha convertido a varias ciudades y cantones en focos críticos, con un promedio diario de 25 asesinatos en el país y un total que podría superar las 9.000 muertes violentas al cierre del año. La centralización del mando en Guayaquil es una apuesta para fortalecer el combate contra el crimen organizado y garantizar mayor seguridad a los ciudadanos.
Fuente: Diario El Universo
