El incremento en el precio del pimiento verde y otras verduras frescas ha generado un impacto notable en la alimentación diaria de las familias y en la operación de comedores populares en Guayaquil y otras zonas del país. El pimiento verde, uno de los ingredientes básicos en la cocina local, ha experimentado un alza significativa en su costo, alcanzando precios que dificultan su inclusión habitual en los menús.
Según registros recientes, el precio del pimiento verde en saco de 18 kg ronda los 8 a 10 dólares, mientras que otros vegetales como la cebolla colorada también han mostrado incrementos cercanos al 11 %. Esta situación obliga a los hogares a modificar sus recetas tradicionales, reduciendo el consumo de verduras frescas o sustituyéndolas por opciones más económicas.
Los comedores populares, que atienden a sectores vulnerables, enfrentan el reto de mantener la calidad y variedad de sus menús sin incrementar los costos para sus usuarios. Para ello, han implementado estrategias creativas, como la reducción en la cantidad de verduras, la búsqueda de proveedores alternativos o la incorporación de productos en temporada más accesibles.
El alza en los precios de verduras frescas se suma a un contexto general de inflación en alimentos básicos, donde también se han registrado aumentos en arroz, tomate, cilantro y lechuga, afectando la canasta básica familiar, cuyo costo promedio en Guayaquil supera los 800 dólares mensuales.
Autoridades y expertos llaman a monitorear la situación para evitar que el encarecimiento prolongado de productos frescos afecte la nutrición y la seguridad alimentaria de la población, especialmente en los sectores más vulnerables.
Fuente: Diario El Universo