Silvia Delgado, exabogada defensora de Joaquín “El Chapo” Guzmán, fue elegida jueza penal en el estado mexicano de Chihuahua tras obtener una votación significativa en un proceso electoral judicial sin precedentes. Delgado, quien formó parte del equipo legal que defendió al líder del Cártel de Sinaloa antes de su extradición a Estados Unidos, ocupará su cargo durante nueve años en Ciudad Juárez, una de las ciudades más afectadas por la violencia del narcotráfico. La elección se realizó mediante voto popular, un mecanismo implementado para democratizar la designación de jueces en México.
Su elección ha generado polémica y preocupación en diversos sectores. Organizaciones de derechos humanos y expertos legales han cuestionado la idoneidad de Delgado para el cargo, debido a su vinculación pasada con un acusado de crimen organizado. Sin embargo, Delgado ha declarado que su experiencia le permitirá fortalecer el sistema judicial y que su compromiso es con la ley y la justicia, no con intereses criminales.
Este proceso electoral judicial, que involucró la elección de miles de funcionarios judiciales, ha sido criticado por la baja participación ciudadana y la inclusión de candidatos con antecedentes controversiales. El caso refleja los desafíos que enfrenta México para garantizar la independencia y transparencia en su sistema judicial, especialmente en zonas con alta incidencia delictiva.
Fuente: Deutsche Welle (DW)