Pakistán exigió a India la restauración inmediata del tratado de aguas que regula el uso y distribución de los recursos hídricos compartidos, tras una escalada militar en la región fronteriza. Islamabad denunció que India ha violado los términos del acuerdo, afectando el suministro de agua y generando tensiones diplomáticas. La demanda se produce en un contexto de creciente confrontación y desconfianza entre ambos países.
El tratado, conocido como el Acuerdo de Aguas de Indus, es fundamental para la gestión pacífica de los ríos que cruzan ambas naciones. Pakistán advirtió que la interrupción del flujo de agua podría tener consecuencias graves para la agricultura y la población. Además, instó a la comunidad internacional a mediar para garantizar el respeto al acuerdo y evitar un conflicto mayor.
India, por su parte, ha justificado algunas acciones como medidas de seguridad y desarrollo interno, negando violaciones intencionales. La disputa refleja la complejidad de las relaciones indo-pakistaníes, marcadas por conflictos históricos y rivalidades geopolíticas. Ambas naciones mantienen un diálogo limitado y episodios de violencia en la frontera.
La restauración del tratado es vista como clave para la estabilidad regional y la cooperación en recursos naturales, en un área donde el agua es un recurso estratégico y escaso.
Fuente: Deutsche Welle