La Asamblea Nacional de Vietnam aprobó una reforma legal que elimina la pena de muerte como sanción para ocho delitos, incluyendo la malversación de fondos y actividades destinadas a derrocar al gobierno, a partir del 1 de julio de 2025. Esta modificación reduce la lista de crímenes capitales y reemplaza la pena máxima por cadena perpetua, reflejando un cambio en la política penal alineado con tendencias internacionales y demandas humanitarias.
Entre los delitos que dejarán de ser castigados con la pena de muerte se encuentran el espionaje, la corrupción pasiva, la aceptación de sobornos, el tráfico de drogas, el vandalismo contra propiedad estatal, la producción de medicamentos falsificados y la provocación de guerras invasivas. La reforma fue aprobada por casi el 90% de los legisladores, mostrando un amplio consenso político.
La medida busca facilitar la cooperación internacional y fortalecer la confianza mutua en el ámbito judicial, mientras se mantiene la pena capital para otros diez delitos graves como asesinato, terrorismo y abuso sexual de menores. En 2024, Vietnam aplicó la pena de muerte a más de 150 personas, principalmente por delitos relacionados con drogas, y mantiene a más de 1.200 en el corredor de la muerte.
Organizaciones internacionales como Amnistía Internacional y el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos han valorado positivamente la reforma, aunque continúan instando a Vietnam a abolir completamente la pena de muerte. El ministro de Justicia vietnamita destacó que esta reforma representa un avance significativo en la política penal del país.
Este cambio legal refleja un proceso de modernización y humanización del sistema judicial vietnamita, con impacto en la protección de los derechos humanos y la imagen internacional del país.
Fuente: Deutsche Welle