Una combinación de una primavera extremadamente húmeda y una ola de aire cálido proveniente del norte de África ha propiciado una migración masiva de polillas gigantes hacia España, especialmente en regiones como Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Madrid, Galicia, Murcia y Andalucía. Las especies más visibles son Hyles livornica y Autographa gamma, siendo la primera de mayor tamaño (hasta 5 centímetros de envergadura) y la segunda más pequeña pero mucho más numerosa.
Aunque su presencia masiva ha generado alarma y molestias en hogares, calles y edificios públicos, los expertos aseguran que no representan ningún peligro para los humanos, ya que no pican ni transmiten enfermedades. Estas polillas son migratorias y su aumento se relaciona con las abundantes lluvias en el norte de África y las condiciones climáticas favorables en la península, que aceleran su reproducción y favorecen su expansión.
Las autoridades recomiendan medidas preventivas como cerrar ventanas al anochecer y reducir la iluminación exterior para evitar que se acerquen a las viviendas. A pesar de la percepción de “plaga”, los especialistas insisten en que se trata de un fenómeno natural cíclico que forma parte de la biodiversidad local y cumple un papel ecológico importante.
Fuente: Deutsche Welle (DW)
