La noche del 25 de junio de 2025, alias ‘Fito’, cabecilla de la organización criminal Los Choneros, llegó a la Base Aérea Simón Bolívar de Guayaquil bajo un impresionante despliegue de seguridad. El traslado se realizó en una avioneta de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), acompañado por los ministros del Interior, John Reimberg, y de Defensa, Gian Carlo Loffredo. La aeronave aterrizó alrededor de las 21:30, y el detenido fue inmediatamente embarcado en una tanqueta militar. El operativo fue ejecutado exclusivamente por fuerzas ecuatorianas, sin intervención extranjera, según confirmaron las autoridades. La llegada marcó el inicio de una nueva fase en el proceso judicial del líder criminal.
El ingreso a la base aérea estuvo resguardado por cuatro filtros de seguridad, con decenas de militares y policías desplegados en los accesos. Solo personal autorizado pudo ingresar, y se exigió identificación rigurosa a todos los presentes. La zona fue acordonada para evitar cualquier intento de sabotaje o fuga. El ministro Reimberg declaró que esta operación forma parte de una estrategia nacional para desarticular a las mafias. Por su parte, Loffredo reafirmó que no habrá tregua en la lucha contra el crimen organizado.
Alias ‘Fito’ fue capturado horas antes en un búnker subterráneo en Manta, tras 17 meses prófugo. Su fuga en enero de 2024 desató una ola de violencia que incluyó atentados, motines y asesinatos selectivos. La operación de recaptura fue ejecutada por el Bloque de Seguridad sin bajas ni enfrentamientos. El presidente Daniel Noboa anunció la noticia como un triunfo de las leyes de Solidaridad e Inteligencia. La ciudadanía siguió cada paso del traslado con atención a través de medios y redes sociales.
Aunque las autoridades no confirmaron su destino final, se presume que alias ‘Fito’ fue trasladado a la cárcel de máxima seguridad La Roca, en la vía a Daule. El Gobierno ha iniciado los trámites para su posible extradición a Estados Unidos, donde enfrenta cargos por narcotráfico y tráfico de armas. La llegada a Guayaquil representa un punto de inflexión en la política de seguridad del país. La presión pública exige que se garantice su reclusión y se evite una nueva fuga. La expectativa ahora se centra en el avance de sus procesos judiciales.
La comunidad internacional ha reaccionado positivamente al operativo. La Embajada de Estados Unidos felicitó al Gobierno ecuatoriano y reiteró su apoyo en la lucha contra el crimen transnacional. La ciudadanía, por su parte, ha expresado alivio y esperanza ante la posibilidad de justicia. La llegada de alias ‘Fito’ a Guayaquil no solo simboliza el fin de su fuga, sino también el inicio de una nueva etapa en la ofensiva estatal contra las mafias. Las próximas horas serán clave para definir su destino judicial. Ecuador, por ahora, ha recuperado el control de uno de sus criminales más peligrosos.
Fuente: Diario El Universo
